Entre cartas, escritos, tarjetas y dibujos rescato una frase que, apenas leída, me hizo decir en voz alta «qué buena frase». Quizás no siempre se aplique pero para aquellos que tienen personas en quienes confiar, es más que contenedora. Ahí va:
«Cuando te duela mirar hacia atrás y te dé miedo mirar hacia adelante, mira hacia la izquierda o la derecha y allí estaré, a tu lado».
0 comentarios:
Publicar un comentario